Hoy, el régimen iraní confirmó la sentencia de muerte de Sharifeh Mohammadi, una madre, activista laboral y defensora de los derechos de las mujeres. Su único acto fue defender la justicia y la dignidad. Ahora enfrenta la ejecución, dejando atrás a un niño pequeño que puede que nunca más sienta su abrazo. Esto no es solo un ataque a una mujer, es un ataque a cada madre que se atreve a soñar con una vida mejor para sus hijos. Cuando la injusticia amenaza a los más vulnerables entre nosotros, nuestro silencio se convierte en consentimiento. Debemos alzar nuestras voces por Sharifeh, porque su lucha es la lucha de todos nosotros. #SharifehMohammadi