🤍 Los osos polares no son realmente blancos. Su pelaje es transparente y hueco, reflejando la luz solar como el hielo y haciéndolos parecer blancos como la nieve o, a veces, incluso amarillos. Debajo de todo ese pelaje hay una piel de color negro azabache que absorbe el sol del Ártico. La máxima ilusión de la naturaleza.
52.46K