El gobierno israelí está considerando seriamente la anexión de partes de Cisjordania en represalia por el inminente reconocimiento del Estado de Palestina por parte de varios países, incluidos Australia, Canadá, Francia y el Reino Unido, según varios funcionarios israelíes, estadounidenses y europeos con conocimiento directo que hablaron con Axios. El ministro de Asuntos Estratégicos israelíes, Ron Dermer, y el ministro de Relaciones Exteriores, Gideon Sa'ar, han dicho a varios homólogos europeos que Israel podría anexar partes de Cisjordania si siguen adelante con el reconocimiento de Palestina, y se dice que Dermer les dijo a los funcionarios franceses que Israel anexaría toda el "Área C", que constituye el 60% de Cisjordania. Tal medida causaría una inmensa indignación y condenaría aún más al ostracismo a Israel entre la comunidad internacional, incluso con aliados cercanos como Estados Unidos. Es poco probable que tal medida sea apoyada por el presidente de Estados Unidos, Donald J. Trump, ya que Trump, durante su primer mandato, impidió que Netanyahu se anexionara partes de Cisjordania dos veces.