El objetivo del debate político es resolver disputas SIN violencia. Lo que le sucedió a Charlie Kirk es simplemente horrible y repugnante. Y en un campus universitario, nada menos, un lugar donde deberíamos celebrar el discurso, no tratar de silenciarlo. Todos en la arena política necesitan hacer un examen de conciencia. Ninguno de nosotros quiere vivir en un polvorín.