Lo que mantuvo alejados a los gobiernos de la blockchain nunca fue la tecnología. Era la falta de control. ADI Chain está diseñada para que los gobiernos desplieguen redes L3 soberanas con normas de cumplimiento personalizadas, mientras se liquidan de forma segura a través de la L2 de ADI usando $ADI como token de gas. Esta configuración genera un uso sostenido en todas las infraestructuras nacionales: • Vías de pago que gestionan transacciones transfronterizas • Registros de tierras que procesan transferencias de bienes • Sistemas de identidad digital que emiten credenciales • Plataformas de facturación electrónica que liquidan pagos empresariales A esa escala, el volumen de transacciones se convierte en actividad recurrente en la cadena de trabajo, donde la ejecución depende de $ADI. ADI Chain avanza con 50+ proyectos institucionales y empresariales en más de 20 países, y cada nuevo despliegue aumenta el uso de la red. Con el cumplimiento programable a nivel de protocolo, las jurisdicciones pueden establecer sus propias reglas sin tener que reconstruir la infraestructura desde cero. → Los gobiernos despliegan cadenas soberanas → Las instituciones desarrollan aplicaciones → $ADI liquida transacciones en todas las redes La infraestructura está activa. La adopción está en marcha. Eso es diferente.