Es posible que el Alzheimer no se trate solo de amiloide y tau. Un nuevo estudio apunta al litio, un oligoelemento medido en microgramos, como una pieza faltante de la resiliencia cerebral. Entre los 27 metales en los cerebros humanos post-mortem, el litio fue el único reducido en personas con deterioro cognitivo leve y Alzheimer. Las placas amiloides atraparon el litio, dejando la corteza cercana agotada, y los niveles más bajos se rastrearon con una peor cognición. En ratones, reducir el litio en ~ 50% impulsó la patología clásica de Alzheimer: más amiloide, más fosforilación de tau, microglía inflamada, pérdida de sinapsis y mielina, y déficits de memoria. Gran parte de esto se relacionó con GSK3β hiperactiva, una quinasa relacionada con la neurodegeneración. El tratamiento con orotato de litio (que evita el secuestro de amiloide) restauró el litio cerebral a dosis fisiológicas bajas. También redujo la carga de placa en un 70% en los modelos de enfermedad de Alzheimer y revirtió la patología, incluso rescatando el rendimiento de la memoria. doi: 10.1038/d41586-025-02255-w